La retención de IRPF que aplica a un trabajador depende no solo del sueldo de un empleado sino que también de su situación personal.
Para ello la AEAT pone a disposición de los contribuyentes la calculadora de retenciones que podéis encontrar aquí.
En la calculadora no solicita tanto los datos personales como laborales del empleado que se pretende calcular. El porcentaje que nos de la calculadora será el que se tenga que aplicar sobre la cantidad perteneciente a la base de retención de IRPF.
Cabe destacar que cualquier cambio en la situación del trabajador o su sueldo, implica un nuevo tipo de retención por lo que será necesario volver a realizar los cálculos y ajustarlos respecto al ejercicio en curso.